Uno de los tradicionales postres durante la temporada de cuaresma es la capirotada. Un postre unido a una tradición religiosa y que ha sobrevivido durante décadas. Existen muchas versiones de ella, una no muy conocida es la capirotada de picón, un postre de origen jalisciense. ¿Ya la conoces?
La capirotada es un postre de origen español, nació durante la época de la conquista en México y a día de hoy se sigue preparando durante la temporada de Semana Santa. En cada hogar se prepara de diferente manera y cuentan con una versión propia que la diferencia de otras. Esto hace que en realidad no exista una receta original, sólo algunas más similares a otras, pero hablemos un poco de su origen.
Historia de la capirotada
Desde la antigua Roma existen antecedentes remotos acerca de una receta preparada con trozos de pan, bañados de vinagre con agua, seguidos de capas de pollo, alcaparras y pepino.
Fue en España que se consolidó una receta más similar a la que conocemos en México. La diferencia radica en que la versión española era preparada con embutidos y otros ingredientes salados. Posteriormente, esta receta llegó a la Nueva España durante la época de la conquista y evolucionó hasta llegar a las recetas que conocemos a día de hoy.
¿Por qué se llama capirotada?
Su nombre deriva del gorro “capirote”, palabra con la que son conocidos. Este gorro es utilizado por ciertos sacerdotes durante las procesiones de semana santa y que se caracteriza por ser alto y puntiagudo.
Un simbolismo religioso
Sus ingredientes cuentan por sí mismos una historia y cada uno tiene un significado que nace de la fusión de la religión católica y las culturas prehispánicas de México.
El pan viejo hace alusión al cuerpo de Cristo, la miel de piloncillo su sangre. La canela a la cruz en la que fue crucificado y los clavos a las herramientas con las que fue clavado. El queso, como muchos aseguran, hace referencia a la manta con la que fue cubierto Cristo durante su sepultura.
Sin embargo, no existe una versión oficial por parte de la iglesia católica que confirme esta tradición.
¿Por qué se come durante la cuaresma?
Dentro de la religión católica, la cuaresma es un tiempo de reflexión, penitencia y preparación para la Semana Santa. En esta se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
La tradición dicta que durante este período se debe mantener ayuno y abstinencia de comer carne durante el miércoles de ceniza y todos los viernes de cuaresma. Además del viernes santo.
Receta para preparar capirotada de picón
Antes de iniciar con la receta te voy a explicar un poco sobre el picón.
Este es un pan dulce típico en el estado de Jalisco, tiene una forma similar a la concha solo que con una consistencia más firme. Está hecho a base de harina de trigo, huevo, canela y azúcar. Se dice que los mejores los hacen en Ameca, un pueblo cercano a la zona metropolitana de Guadalajara y que desde finales del siglo XIX es tradicional del lugar.
Así se prepara
- 3 picones
- 1 litro de leche
- 1 rama de canela
- 2 cucharaditas de vainilla
- 3 cucharadas de maicena
- 1 lata de leche condensada
- 1 lata de leche evaporada
- ½ taza de nuez picada
- 500 gramos de fresas
- 100 gramos de coco rallado
Primero haz el atole de vainilla.
En un cazo u olla hierve la leche junto con la canela, después agrega la leche condensada, la leche evaporada y la vainilla.
En un vaso aparte con agua fría, disuelve la maicena y agregala a la olla con leche, mezcla hasta que espese.
Retira del fuego y espera a que se enfríe.
En un refractario o cazuela de barro coloca una capa de rebanadas de picón, una capa de fresas picadas, una capa de nuez y una capa de coco rallado. Agrega el atole una vez terminada la primera capa.
Continua hasta que termines con las rebanadas de picón y decora con más fresas frescas, nuez y coco. Asegúrate de que el pan tenga suficiente atole para remojarse.
Una vez terminado, cubre el refractario con su tapa o papel aluminio y refrigera durante al menos dos horas o toda la noche. Este postre se disfruta mejor frío.
Ahora ya sabes como hacer una capirotada de picón estilo Guadalajara. Esta es solo una de las muchas versiones que existen, recuerda que puedes darle un giro a esta receta y agregar tus ingredientes favoritos. Esperamos que la prepares y te guste tanto como a nosotros.
Comenta si conoces alguna otra versión acerca de este tradicional platillo de cuaresma. Gracias por leernos y esperamos verte en el próximo artículo.
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